Paquirrín ya sabe decir ‘mamá’

A las pocas horas de nacer, sus primeras palabras fueron ‘ketchup’ y ‘minifalda’.

Salvador Sal y Brazos (Sevilla).- La naturaleza es a veces caprichosa, y muchas otras veces nos ofrece portentos de su cosecha. Francisco Rivera Pantoja (Sevilla, 1984), popularmente conocido como Paquirrín, está prosperando a cada día que pasa en su forja como ser humano que piensa e interactúa.

Ayer, 6 de octubre, se le escuchó por fin decir ‘mamá’. Era la primera vez que lo decía, y su madre, la famosa tonadillera Isabel Pantoja, no cabía en sí de la emoción.

‘Kiko sabe decir muchas palabras, aunque le ha costado su tiempo, pero ‘mamá’, con esa dicción y esa claridad con las que lo dijo, yo nunca se lo había escuchado’, confesó Isabel Pantoja secándose las lágrimas con un kleenex, con esa elegancia que ella gasta, tratando de no estropearse el rímel de los ojos.

Kiko Rivera Pantoja, a la derecha, junto a su ¿hermano? Cayetano Rivera Ordóñez

Con 27 años, Kiko Rivera sólo se había dirigido a su madre por otros motivos, pero nunca había utilizado el apelativo con el que cualquier hijo se dirige a la persona que le ha dado la vida. ‘Amáaa, un bocaíllo atún con pimientoh, anda, que a la nueve me arrecohe la Yézica pa innoh al Pashá Shipiona’, nos dice Isabel que le dijo ayer por la noche, a la hora de la cena. ‘Lo siento Kiko, pero te acabaste los pimientos en el desayuno, ya no quedan’. ‘Pero mamáaaaaa…’. Y aquí es cuando la viuda de España se sorprendió, cuando su hijo dijo ‘mamá’ perfectamente.

Los bocadillos de atún con pimientos son una de las debilidades de Paquirrín

Paquirrín, al que a su edad todavía no se le conoce oficio ni beneficio pero que de negocios entiende bastante, ya ha hablado con su mánager para que contacte con las revistas del corazón. Están dispuestos a vender una entrevista exclusiva al mejor postor profundizando en los pormenores de este asunto. ‘El precio de salida de la exclusiva serán 300.000 euros, y será el medio especializado que más ofrezca aquel al que se la concedamos’, nos comunica Kepa Loalagua, mánager del showman y, a veces, monologuista. ‘Por un 10% adicional al precio final de la entrevista, Kiko además se dejaría fotografiar el último tatuaje que se ha hecho, y aviso a posibles interesados de que no tiene desperdicio’, termina diciendo Kepa Loalagua.

Paquirrín estaba a punto de marchar hacia Pachá Chipiona cuando de pronto dijo 'mamá'

Las revistas del corazón tienen carnaza, perdón, material nuevo para llenar sus páginas, para que sus lectores puedan seguir disfrutando de publicaciones de la talla de ‘Hola o ‘Diez minutos’, por citar sólo dos. Si no existiesen artistas como Isabel Pantoja o su hijo, la población de este país caería en el tedio, la desesperación y, quién sabe, quizá, siendo alarmistas, incluso podrían llegar a abrir un libro.